Todas estas nuevas tecnologías aplicadas y controladas de una manera correcta permiten alcanzar hoy día impresiones de muy alta calidad y que son equiparables al huecograbado y al offset.
LA ESTANDARIZACION DE LOS PROCESOS. En flexografía se suele decir que la única constante que hay es la gran cantidad de variables que existen en el proceso, por lo tanto es lógico afirmar que, la calidad final de impresión dependerá del control que tengamos sobre esas variables. Es por ello que la organización de procesos y procedimientos técnicos de cada una de las áreas de trabajo cobra más sentido que nunca.
Hay que decir que en muchas ocasiones, una mayor calidad de impresión o la optimización de los tiempos de producción, no pasa precisamente por la incorporación de las últimas tecnologías o el equipamiento de maquinaria de última generación, sino más bien, por la organización de la producción y una gestión más eficiente de la calidad, sin olvidar la formación continua de todo el personal involucrado en el proceso flexográfico con el fin de elevar su nivel profesional que les permita aplicar correctamente las nuevas tecnologías disponibles.
LA NORMA ISO 12647/6 FLEXOGRAFIA. Las ventajas de implementar esta norma internacional para impresión flexográfica son evidentes ya que ponerla en marcha nos obliga indirectamente a establecer un método de trabajo y, sobre todo, a tener un mayor control sobre nuestros procesos productivos, no solo en la impresión, sino también en el laboratorio de color (preparación y formulación de tintas), o en la fotomecánica. Estandarizar implica fijar las variables críticas del proceso de impresión dentro de unos márgenes de tolerancias prefijadas, para asegurar que mediante el control de estas variables el sistema estandarizado se comporta de forma estable.
OPTIMIZACION DE LA CALIDAD DE IMPRESIÓN EN BASE A PARAMETROS PROPIOS. Puede ocurrir en muchos casos, que debido a los tipos de trabajos que se imprimen, con soportes especiales, condiciones de impresión, tramados de alta calidad y lineatura, etc., conlleve la imposibilidad de ser llevados a norma alguna y por lo tanto queden fuera de las especificaciones recogidas en la norma ISO 12647/6. Aun así las necesidades de estas empresas y flujos de trabajo particulares son las mismas y requieren igualmente de un control extremo de la impresión para lograr gamas cromáticas de reproducción mayores y alta calidad del producto final.
En estos casos y para asegurar y optimizar la calidad de impresión, se han de desarrollar procedimientos en base a parámetros propios a medida, para lograr establecer las características y condiciones de impresión óptimas para un sistema de trabajo concreto y específico. Siempre pasando por “parámetros medibles” seremos capaces de definir y controlar los estándares propios de cada impresora